El centro de recría de novillas de raza frisona de Castro de Ribeiras de Lea (Castro de Rei, Lugo), el primero de titularidad pública de toda España, empezará a funcionar el 5 de junio, después de años de obras y una inversión por parte de la Diputación de Lugo próxima a los doce millones de euros.

Fuentes del Gobierno provincial confirmaron a Efe que el centro comenzará a funcionar ese día con la entrada de cincuenta novillas, todas procedentes de granjas de leche de la provincia de Lugo, dado que los ganaderos lucenses tienen preferencia sobre los demás.

En todo caso, existe demanda por parte de explotaciones de otras provincias gallegas, según confirmó a Efe el propio director del centro de recría, Rogelio Grille, después de las conversaciones mantenidas en las últimas semanas con más de un centenar de ganaderos de Lugo, A Coruña y Pontevedra.Grille aclaró que la mayoría de los ganaderos que han manifestado su interés por recriar a sus novillas en el centro de Castro son de la provincia de Lugo, habida cuenta de que las explotaciones lucenses tienen preferencia para el uso de esas instalaciones, pero también se han mantenido contactos comerciales con granjas de A Coruña y Pontevedra, interesadas en los servicios que ofrecen estas instalaciones.

Inicialmente, estaba previsto que el centro de recría de Castro de Ribeiras de Lea empezase a funcionar en enero con la entrada de las primeras novillas, pero su apertura se retrasó hasta la finalización de unas obras realizadas para subsanar algunas deficiencias detectadas en el saneamiento de las instalaciones.

El presidente de la Diputación, Darío Campos, precisó que siempre tendrán “preferencia los ganaderos de Lugo” para recriar a sus animales en el centro, salvo que queden plazas vacantes, porque entonces podría abrirse el servicio a productores de otras provincias.

Darío Campos recordó que la Diputación de Lugo ha invertido “doce millones de euros en solitario” para poner a funcionar estas instalaciones, que además de generar una importante actividad económica, supondrán un notable ahorro para los ganaderos, cifrado en unos trescientos euros por novilla recriada.

En las instalaciones, en las que trabajarán nueve personas, además de un gerente, las novillas entrarán con más de quince días de vida y permanecerán unos veintiún meses, de modo que algunas de ellas ya saldrán preñadas y con embriones de alto valor genético.

El precio que pagarán los ganaderos por ese trabajo de recría será de 2,39 euros por día.

Fuente: agroinformacion.com

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